Generalmente el uso continuo de las puertas, desgasta las cerraduras y llaves de manera que terminan por dañarse y generar complicaciones posteriores como atascos con llaves, roturas y corrosión.
Por ello lo ideal es hacerles mantenimiento preventivo para evitar gastos innecesarios que luego pueden multiplicarse por no tomar las medidas a tiempo. Aquí te dejamos útiles consejos para que tus cerraduras tengan mejor rendimiento y duración.
Trata tus cerraduras de manera cuidadosa. No empujes las llaves de forma brusca, tampoco azotes las puertas, procura no exponerlas al frío, la lluvia o la nieve para que no se oxiden o se corroan.
Engrase con aceite las cerraduras y llaves cada cierto tiempo para que no se atasquen y dañen los cilindros. Las llaves deben entrar y salir de los orificios de la cerradura de manera correcta y fluida.
También puedes utilizar nuevos productos que ofrece el mercado, como sprays o aerosoles elaborados en base a aceites especiales para lubricar tus llaves, bisagras y cerraduras de manera que siempre funcionen a la perfección.
Limpia con frecuencias tus puertas y evita golpearlas o azotarlas para que no se desnivelen las bisagras o cerraduras. Un daño por un desnivel en las bisagras puede ser un gasto importante en tu presupuesto.
Si tus cerraduras se dañan o deterioran, procura reinstalar el sistema completo para evitar daños más profundos y problemas con las llaves.
Para mantener correctamente una cerradura hay que engrasarla, también las bisagras. Solo así se puede mantener las cerraduras y las bisagras en perfectas condiciones, evitando chirridos o golpes.
Para evitar que la llave se quede atascada hay que lubricar la cerradura utilizando polvo de grafito, aunque también se puede utilizar aceite de vaselina. El polvo de grafito se distribuye en un trapo, envolvemos en él la llave para engrasarla bien y la metemos en la cerradura para darle unas vueltas y que así se distribuya bien.
Para engrasar las bisagras o pernios hay que elevar un poco la puerta con ayuda de una cuña y un destornillador. Después aplicamos un lubricante para puertas y abrimos y cerramos la puerta varias veces para que se lubrique por toda la zona.
Puede colocar unos cierrapuertas
Los cierrapuertas ofrecen además de comodidad gran seguridad, ya que evitan que la puerta quede abierta. Para que sean eficaces deben cumplir una serie de requisitos. Lo mejor es que lleven el cuerpo sellado, de esta manera se evita tener que cambiar periódicamente el aceite, como sucede con los tradicionales. Es conveniente, además que la velocidad del cierre y el golpe final sean ajustables. Unos ajustes que se realizan mediante tornillos. A veces conviene que tengan además un mecanismo de bloqueo por si es necesario mantener la puerta abierta durante unos minutos
Otra cuestión que puede ser importante es que el cierrapuertas tenga un dispositivo para regular la fuerza de cierre, ya que dependerá de si es una puerta más o menos pesada. Es interesante además que se puedan montar en posición invertida a la habitual, ya que hay que tener en cuenta que en ocasiones puede ser necesario montar el mecanismo al revés.
Por tanto, el cierrapuertas es un elemento que puede garantizar comodidad y puede evitar averías innecesarias. Pero los hay de diferentes características que hay que tener muy en cuenta a la hora de elegir el que necesitamos. Además, para que no pierda funcionalidades, tiene que estar montado correctamente y ajustado, si no es así acabará dando problemas.
También hay que tener en cuenta que los cierrapuertas, como cualquier otro elemento, necesitan un mantenimiento. No es algo laborioso, pero las condiciones del aceite que hay en su interior cambian con la temperatura exterior, por ello según la estación puede ser necesario hacer unos pequeños ajustes para que el cierrapuertas funcione perfectamente.
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