En climas secos, los evaporadores de la batería exterior pueden sufrir un problema que puede llegar a ser preocupante: cuanto mayor flujo de aire necesite su aparato de aire acondicionado, menor flujo de aire frío arrojará sobre el interior de su hogar. En climas húmedos, la situación es algo similar. En los flujos de aire más fuertes, habrá menos de deshumidificación, que provocará que haya altos niveles de humedad en el interior de la estancia.
Si el flujo de aire es muy bajo, sin embargo, el serpentín del evaporador puede que acumule escarcha que le impida funcionar con normalidad. Esto provoca que el rendimiento de su máquina peor y podría llegar a dañar el compresor e incluso romperlo, lo que le obligaría a reponer la pieza estropeada o a sustituir su aparato de aire acondicionado. Sin duda, una opción cara y poco agradable.
Qué hacer con los filtros
Casi todos los sistemas de aire acondicionado tiene un filtro de agua en la parte de arriba del serpentín del evaporador. Existen dos lugares para localizarlo: en la rejilla del ventilador o en las ranuras especiales que hay sistema de conductos. La función del filtro es eliminar las partículas de la corriente de aire para mantener el sistema de aire acondicionado limpio y para eliminar las partículas en suspensión que arrastra el aire.
A medida que el filtro hace su trabajo, suele acumular más y más partículas que se apelmazan en la rejilla. Si la rejilla, por la acumulación de suciedad, impide el paso del aire, provoca que el rendimiento del aparato de aire acondicionado sea menos eficiente, además de forzar el mecanismo para consumir más energía y reducir el flujo de aire frío a su hogar. Cuando detecte alguna de estas situaciones, será el momento de cambiar el filtro. ¿Cada cuánto tiempo es necesario cambiarlo? Esto dependerá del grado de suciedad del aire es y de lo grande que sea.
Si no se cambian los filtros a tiempo, el flujo de aire variará considerablemente y el sistema no funcionará bien. Además, hay otro aspecto que le conviene no olvidar. Un filtro sucio puede contaminar el aire de su habitación. Sin el filtro la máquina puede seguir funcionando con normalidad. Ahora bien, no intentes hacer, porque en ese caso las partículas que antes de depositaban en el filtro se acumularán ahora en el serpentín del evaporador y harán que su equipo. Un nuevo filtro es mucho más barato.
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Mantenimiento del sistema
El mantenimiento periódico de tu aparato de aire acondicionado con acciones muy fáciles de llevar a cabo, como el cambio de filtros, puede ser realizado por la mayoría de los consumidores, aunque algunos de los procedimientos de revisión y limpieza deben ser llevados a cabo por un servicio profesional.
Para mantener tu máquina en perfectas condiciones puede probar a cepillar la suciedad y eliminar obstrucciones de las bobinas y los desagües, siempre que vaya a empezar la temporada en la que más vaya a utilizar su equipo de aire acondicionado. Dependiendo del sistema y del consumo que haga de su unidad, deberá acudir a un servicio de un profesional o no.
Si detectas que el sistema no está produciendo tanto aire frío como debería, podría deberse a una pérdida en la carga del refrigerante o problemas en el flujo de aire. Estos problemas pueden requerir una revisión inmediata por si hubiera que sustituir alguna pieza o rellenar la carga de gas refrigerante.
Algunas señales importantes que debes identificar
Otra de las razones que pueden hacer que note que su máquina no está produciendo suficiente aire frío se debe a las fugas de conductos, que pueden llegar a consumir del 20% al 40% de la energía. Para evitar cualquier fallo relacionado con estos elementos, los conductos exteriores deben estar bien aislados. En las tiendas especializadas podrá encontrar diversos productos para conductos que se pueden utilizar con facilidad para revestir los elementos que quedan a la intemperie. En reparacionesbarcelona.es para cualquier consulta somos expertos y podremos ayudarte.