La mayoría de las casas construidas ya disponen de servicio de aire acondicionado con el que van equipadas. Aún hoy, para algunos, el aire acondicionado es un lujo propio del estatus social en el que vive, pero para otros, es una necesidad para soportar temperaturas extremadamente altas o extremadamente bajas. Estas son algunas de las curiosidades sobre al aire acondicionado que deberías conocer para hacer un buen uso de su equipo de aire acondicionado y mantenerlo en óptimas condiciones. Con ello, alargarás la vida de su máquina y se evitará muchos sustos en facturas de luz y de reparación. Si fuera necesario sustituir su sistema actual, busque a un profesional cualificado en Climatización como los de reparacionesbarcelona.es.
Cosas que debería saber (I).
El trabajo que desempeña su aparato de aire acondicionado en casa es mover el calor desde el interior de su casa hacia el exterior, con lo que tú y tu hogar podrán disfrutar de una temperatura agradable en todo momento. Los aparatos de aire acondicionado hacen que aire fresco fluya hacia el interior de su casa al enfriar el aire que pasa por unos tubos fríos llamados bobina de evaporador. Este sistema utiliza el mismo procedimiento por el que el agua se evapora de la piel.
El serpentín del evaporador se llena con un líquido especial refrigerante, que cambia su estado a medida que absorbe el calor del aire. El refrigerante se bombea fuera de la casa a otra bobina donde se condensa el calor y regresa a su estado líquido. El compresor se utiliza para mover el refrigerante entre las dos bobinas y para cambiar la presión del refrigerante de manera que todo el líquido se evapora o se condensa en las bobinas adecuadas, según la necesidad del momento.
La energía para llevar a cabo todo este proceso la recoge el motor que hace que el compresor funcione. Todo el sistema es capaz de generar tres veces la energía de refrigeración que utiliza el compresor. Este hecho ocurre porque el cambio de estado del refrigerante de un líquido a un gas o al revés permite que el sistema consuma más energía que la que necesita el compresor.
Antes de que la refrigeración mediante el aire acondicionado fuera inventada, el enfriamiento se realizaba acumulando grandes bloques de hielo. Cuando las máquinas de refrigeración comenzaron a implantarse en los hogares, se comparó la cantidad de hielo equivalente a la fuerza de un aparato de aire acondicionado y se calculó que sería de una tonelada. Una casa pequeña de aire acondicionado central sería alrededor de dos toneladas y uno grande cerca de cinco toneladas.
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Qué puede ir mal
Los aparatos de aire acondicionado son sistemas mecánicos complejos que dependen de una gran variedad de condicionantes para que funcionen correctamente. Están diseñados para proporcionar cierta cantidad de refrigerante, conocido como la carga. En el interior de los aparatos, las bobinas reciben una cantidad de aire. Si en algún punto del proceso esto, falla, el sistema tendrá problemas
para funcionar correctamente. Si produces más calor del que necesita, su aparato funcionará forzado y podrá estropearse. Si la carga de refrigerante en el sistema de escapa por cualquier tipo de fisura notará que la capacidad de enfriamiento del sistema se reducirá. En caso de que esto ocurra, percibirás que recibe una calidad de refrigeración menos y que el sistema de aire acondicionado no será capaz de absorber el aire caliente de la estancia para expulsarlo al exterior de la vivienda y devolverlo fresco, constante y sin malos olores.
Si por alguna circunstancia el flujo de aire que circula a través de los serpentines del condensador exterior se reduce, la capacidad de para expulsar el calor al aire libre se reducirá y, de nuevo, la capacidad de su sistema de aire acondicionado se podrá ver mermada, sobre todo si en la zona en la que vive atraviesa una estación cálida y especialmente seca.